Trasplanté el aloe,
que estaba pidiendo espacio,
como vos.
Y le di aire,
oxígeno,
le puse tierra,
para verlo expandirse,
para verlo crecer.
A veces sólo podemos
dar oxígeno,
no hay más,
a veces
se resbalan de las manos,
las posibilidades de entrega,
no
porque uno no quiera,
o porque el otro no reciba,
sino porque la única manera,
es,
crecer solo.
Hoy planté caléndula,
la esparcí sobre la tierra,
y la dejé,
para darle el tiempo de hacer (se)
Las apoye en una base
de mi casa,
en mis bases,
las dejé,
para que ocupen espacio,
para que tomen
con fuerza
el lugar,
en el que quieran
echar raíces.
Y acá estoy,
estoy solo,
como casi nunca.
Hice un budín,
y también
estoy cocinando ravioles.
Hago
Hago
Hago
Para no escribirte,
para tu oxígeno,
para tu oxígeno,
y el mío.
Escucho un pianista,
lo dejo entrar,
A mi,
A mi,
como un oxígeno,
calma la ansiedad,
de pensar
que no hay nada,
Si no estás.
Calma,
una mano desesperada,
una mano desesperada
que aprieta un piano,
y sólo saben salir,
melodías.
No quiero
No quiero
ni puedo presionarte
más,
nada bueno
va a salir,
si sólo me balanceo
sobre vos,
una
una
y otra
y otra vez,
buscando calor,
nada más que frío,
voy a encontrar,
porque me puedo congelar,
porque me puedo congelar,
entre mis ganas,
de que te quedes
y tus ganas,
de respirar.
Encontré la suerte
en un cajón,
la dejamos guardada
por si acaso,
Nos animamos
a ser felices mañana,
sentí
tocar el fondo,
como nunca
como nunca antes,
con suavidad.
Un fondo
Un fondo
que no conocía.
Casi podía acariciar
las raspaduras que traía,
de tanto
patear,
con suavidad
empujé,
y sentí
que de a poco,
de a poco
entre tanta agua revuelta,
revuelta
revuelta
Por nuestras emociones,
podía fluir sin
si,
sin ahogarme.
Y sentí
la sorpresa
de un niño,
de un niño
que no sabe
que no sabe que hacer
con lo que siente
Lo que siente
Ya se hicieron los ravioles,
dejé
algunos congelados,
por si un día,
si un día
nos animamos,
a ser domingo
de familia.
Los ravioles
de la abuela,
que nos mandó.
Dejé
en el freezer
tu parte,
para que respires,
y si querés volver a casa,
sea hogar.

Comentarios